El Juego

 El Juego

Un buen caballo es inteligente y, cuando más lo sea, más le gustara jugar. Además, hacerlo permitirá que el domador, cuidador o propietario le conozca mejor, aumentara la capacidad de atención del caballo y su grado de confianza en quien juega con él, mejorará su motivación. Ello será así siempre que sea la persona que lleve la iniciativa y no el caballo, que impida que éste levante de las manos y que vaya protegida para posibles accidentes provocados por el grado de excitación del animal.